29 de julio de 2016

El Desafio.

Cuando ya apenas quedan horas, no quiero dejar pasar esta costumbre de teneros presentes, ponerme en vuestra piel y recordar ese momento en el que uno siente el hormigueo en el estómago de la incertidumbre. Ese que nos hace preguntarnos si hemos entrenado de menos o de más. Si llevamos todos los achiperres necesarios, incluso, quien cojones nos manda meternos en estos berenjenales..... ya no es momento de dudas, ahora sólo toca ser agua, adaptarse a las circunstancias y disfrutar todo lo que se pueda. Pensar que lo tenéis todo. Un lugar de gentes acogedoras. Unos paisajes guapísimos. Un puñado de amigos pendientes. A por ello. ¡Que salga el Sol por Antenquera si quiere!, pero vosotros a lo vuestro. 

Este rutinas os tendrá presentes y tiene una colección de enormes abrazos preparada para daros cuando nos encontremos en Pola. No es otro el objetivo de mi viaje. ¡Aúpa Locos!