27 de junio de 2014

En la línea de salida.

Llegó el momento. Después de tantas horas pensando en la carrera, horas de entrenamiento y alguna carrera toca situarse en la zona de salida y mirar al frente.

Seguramente pasen muchas cosas por nuestras cabezas (y más a los que salimos a una hora tan "imprudente" como las 22:30h). Posiblemente nos acordaremos de los diversos obstáculos que tendremos que afrontar a lo largo del recorrido pero es importante pensar en todo el bonito entorno que rodea a ésta carrera, intentar recordar todos los momentos que compartiremos con algunos corredores y que seguramente también sean parte de nuestra carrera, con la misma meta e ilusiones. Será una aventura, algo intenso y de mucho esfuerzo, la constancia que tendremos que tener en todo momento incluso en los momentos duros, será duro... pero os conozco, sé que lo intentaremos con gran ilusión y estoy convencido que se hará bien.

Seguro que estaremos ultimando los materiales de carrera, mochilas, revisamos frontales, re-planificamos el recorrido y tiempos de paso, etc. Todos ésto genera “Nervios”, éstos nervios que son los que nos hacen volver a hacer este tipo de locuras que nos hacen sentirnos realmente vivos, estar en contacto de nuevo con la naturaleza y disponer de tiempo para afrontar un enorme reto, sentir el apoyo de la gente que nos quiere y que "intenta" comprender nuestras locuras. Todo ésto es único, tendremos que saber disfrutarlo y sufrirlo.

Quiero agradecer a mi mujer y mi hija que han estado aguantando mis tiempos de entrenamiento fuera de casa , para ellos irá todo este esfuerzo y la meta si tengo éxito.

Nos vemos por la montaña.

¡Aúpa locos del cerro!

Hijos de Zeus

Según la mitología griega los Titanes eran una raza de poderosos dioses que gobernaron durante la legendaria edad de oro hasta que, en la “titanomaquia” (‘guerra de los titanes’) los doce dioses olímpicos, guiados por Zeus, los derrocaron, encarcelando a la gran mayoría de ellos en el Tártaro, la región más profunda del inframundo.
Pero, ¿qué ocurrió después? Pues bien sencillo, los dioses olímpicos comenzaron a tener relaciones con humanos y principalmente Zeus, padre de los dioses y de los hombres, fue siempre conocido por sus numerosas aventuras y amantes. Una de esas aventuras ocurrió no muy lejos de aquí, en la Sierra del Guadarrama hoy convertida en parque Nacional. En esta aventura Zeus transfigurado en distintos hombres conoció múltiples amantes y fruto de esto resultó una estirpe de héroes sin más pretensión que fundirse con Gea, considerada Tierra Madre, en un transitar suave por sus hijas las montañas. Hijos tras hijos, generación tras generación ese grupo de Héroes se dio en llamar “Los Locos del Cerro” y hoy, una vez más, en un rito de gratitud y nobleza a su madre Tierra partirán hacia lo desconocido sin más arma que su férrea voluntad de seguir, pese a todo, siempre con pie firme y sonrisa en la cara. Porque sólo los hijos de aquel que derrocó a los Titanes tienen el valor de afrontar lo inhóspito y vivir para contarlo.
¡Héroes!. ¡Hijos de Zeus!. ¡Locos del Cerro! Hinco rodilla en tierra para saludar a los que en épica batalla entregarán su alma. Recordad en todo momento que pase lo que pase siempre ganaréis porque en esta batalla no habrá vencidos, nadie saldrá perdiendo puesto que desde el mismo momento en que deis el primer paso habréis ganado la admiración, el respeto y el cariño de todos y muy especialmente el mío. Con vosotros locos volará mi espíritu desde el primero hasta el último de los suspiros. ¡Solo vosotros poseéis LA LIBERTAD!


P.D.: Os envidio hasta la locura


No es momento de dudas.

Pues sí amigos, ya está aquí el momento de enfrentarse al gran coloso de la temporada el GTP con sus 110 kms oficiales de recorrido. Los TP  y sus exigentes 80 y 60.
Hasta aquí os llevaron, primero la ilusión, después la euforia y los entrenamientos. Ahora, en estas últimas horas hay que tener confianza.
Confianza en vuestra experiencia corta o amplia, pero suficiente para soportar los embites desfavorables y controlar las euforias desmedidas. 
Confianza en la capacidad de vuestro cuerpo para disfrutar los ritmos cómodos y sobrellevar los tortuosos. Y si se tiene que hacer una pausa, se hace y se reemprende la marcha.
Confanza en vuestra mente. En saber gestionar las crisis que seguro que se presentan y ser capaces de ni precipitarse ni obcecarse en la toma de decisiones.
Confianza en toda vuestra gente que lleva días y semanas a vuestro rebufo, recorriendo cada entreno en vuestras narraciones, padeciendo cada molestia en vuestras quejas.
Ahora, ya no es momento de dudas, confianza y a por vuestros sueños.
Nosotros estaremos en cada recodo del camino, gritando vuestros nombres, sudando con vuestro esfuerzo, llorando con vuestros gestos de dolor, saltando de alegría con la llegada de cada uno a meta.
Recordad que el camino es lo que queda. 
Os deseo a todos el éxito que os mereceis. Estámos orgullosos de cada uno de vosotros y seguros de que nos vais a brindar un espectáculo y una jornada inolvidable.
¡Aúpa Locos!.

11 de junio de 2014

Una historia como la vuestra

Hola a tod@s.

Ha llegado el momento de relataros mi historia, la de un humilde corredor popular aficionado a correr por el monte y enamorado de la montaña. Intentaré ser lo más ordenado posible, diferenciando párrafos, haciendo buen uso de comas y tildes e incluso, evitando frases lapidarias o fáciles recursos literarios (jijiji). Puede que incluso acierte a que las fotos estén ordenadas y los textos legibles.Eso si....deberéis aguantar un buen tocho, porque el primer MAM, se lo merece. ¿no creéis?.Bueno, al lío..

Me decido a inscribirme en el MAM poco después de una conversación con nuestro maestro Prisillas el día que corremos la II Trangoworld Trebol Trail. Mis entrenamientos en éste ultimo mes han aumentado en intensidad y duración. Me noto más fuerte y con mucha confianza. Indudablemente, las palabras de aliento de nuestro MEGAmigo hacen el resto. No es Prisillas una persona que en ésto de los maratones por montaña te quiera vender la moto y le creo muy sincero. Todos necesitamos un empuje, y él me lo dió.

Quizás mi preparación previa no haya sido la más ajustada a los cánones de los entrenos pre-MAM. Quiero decir que me faltó alguna subida más a la zona de carrera: una subida a Peñalara, un bucle de Puerto Navacerrada-Cotos-Cabezas...etc. Con todo ésto, llegan los días previos y los nervios se van dejando notar.Es inevitable que las dudas te asalten a cada momento, más aun viviendo tan cerca de la Sierra y con las antenas de Guarramillas omnipresentes, como oscuros vigías que auguran sufrimiento y felicidad en partes iguales. Las guardias en el SUMMA tampoco ayudan mucho, pero es que correr por el monte no me pone un plato de comida caliente en la mesa....de momento XD.

Una cosa más antes de entrar en los detalles más técnicos de la carrera: el calor y la fuerza que éste grupo de amigos y corremontes que te anima es impagable. Muchas gracias!!! 

Llega el día de la carrera. 8 de Junio de 2014. La noche ha sido corta, me acosté algo tarde, aunque creo que no hubiese ganado muchas horas de sueño acostándome pronto. Desayuno mis acostumbradas tostadas de chocolate y café. Miro las redes sociales con un ojo en el reloj. Tranquilamente me visto de romano y cojo los aperos para ir en busca de Prisi. La mañana es buena, despejada, algo fresca...hoy es un buen día para correr un maratón  de montaña. Y si no lo es....pues habrá que pintarlo.

Llegamos bien a Cercedilla y entonces la primera sorpresa del dia: Luis nos espera en la salida. No se que más decir de ésta gran persona. Pero respóndeme a una cosa Luis: ¿venias a ver ese brillo en los ojos? Espero habértelo transmitido...porque tu me lo has pegado. Gracias por estar allí. Se que tenías muchas razones para vernos salir, para vivir ese ambiente una vez más. Yo me quedo con el breve calor de tu compañia y la fuerza mística de tus palabras. Y entonces llega la hora de meternos al corral ...

 

El ambiente se carga de tensión, la respiración se acelera y las pulsaciones van cogiendo ritmo. En la cuenta atrás echo una última mirada a las antenas de la Bola del Mundo y no me creo que vaya a llegar hasta allí con fuerzas para afrontar las demás cumbres....es de locos.


Los primeros compases de toda carrera siempre son algo inciertos. El ajuste de respiración, zancada, ritmo,etc...depende de tantas cosas. Pero de momento todo iba bien. Estamos situados en todo el pelotón y llevamos un ritmo cómodo. Voy fijándome en Prisi en todo momento e intentando no acelerarme mucho, no se trata de empezar a adelantar a gente en la primera de cambio. Ésto acaba de empezar.

El camino del Calvario a estas horas tiene algo mágico, únicamente roto por los sonidos de jadeos y algún que otro exabrupto. El olor a helecho, el dulce aliento de la turba y el pino, el frescor mañanero de las salpicaduras al atravesar el arroyo en multitud de ocasiones hace de una delicia el ascenso hasta el Puerto de Navacerrada. Prisi y yo vamos juntos hasta los últimos metros en los que antes de coronar el puerto me hace una escapada para un encuentro un poco más intimo con su vástago, Martín. Hoy, su hijo va a ser pieza clave en la gesta a realizar. Gran Prisi, Gran Corazón.

Avituallamos membrillo, platano y liquidos y vamos al encuentro de nuestros amigos Locos, Locas y Cachorros que nos esperan para acompañarnos en el recorrido de hoy. Suben con nosotros Fernan y Gontxu , todos juntos hasta el Collado de Emburriaderos y es ahí donde ya se empieza a destacar un imponente Prisillas y un Fernan que en el día de hoy será como el Ángel de la Guarda. Al no poder seguir su ritmo de subida me quedo rezagado unos minutos en lo que Gontxu y yo avanzamos a paso rapido.En la subida nos encontramos a un siempre sonriente Nicky, otra buenísima persona. Le deseo lo mejor en su próxima supercarrera en su tierra. EL viento ya se hace notar en la subida a lo más alto de Guarramillas. Es en la bajada de ésta cumbre hacia Cotos donde nos espera otra sorpresa: el grueso del grupo de los Locos está armando jaleo y animando como nadie: Alberto, Dioni, Rafa, Luis,Chorry y Kike (lo de antes...espero no dejarme a nadie)

La bajada por la Loma del Noruego la hago tranquilo y reservando para una incierta subida al pico del Peñalara. No he medido mis fuerzas en ésta cumbre y en mi mente no desaparece la temible subida a Cabezas de Hierro, con lo cual debo ser reservado.
Alberto me hace varias pasadas tomando fotos: es impresionante lo suyo. Que bestia parda está hecho. Te doy las gracias de todo corazón por las fotos y los ánimos. De ti no se puede decir nada malo...salvo cuando tiras monte arriba y nos dejas con la lengua fuera. Es cuando me dan ganas de tirarte piedras jajajajajjjajajaj.
Llego a Cotos fuerte y con ganas de cañita. Allí nos esperan una vez más nuestros amigos. Menudo despliegue que hacen...parecemos importantes y todo.

Aprovecho para hacer un rápido avituallamiento y tiramos hacia la más alta cumbre del recorrido. En lo que llevamos de carrera voy acordándome y rememorando situaciones y escenas con mis amigos corredores, con mi familia....con mis hijos y mujer. Y a cada momento me pone un nudo en la garganta. Hoy debo triunfar. Se lo debo a ellos y no todo a mí. Ya en los primeros metros pasado el Club Alpino nos alcanzan Prisi y Fernan jajajajajajajaj "te voy a crujirrrrr" me dice!!! cachisss!! Me ha pillado!! jajajajaja. Ellos tiran para arriba con unas cuantas revoluciones más que las nuestras. La subida a Peñalara por Citores se hace algo correosa a pesar de la belleza y amablemente se suaviza al final en el momento de que el terreno empieza a ser más descarnado y pedregoso. El calor ya se empieza a notar y las caras se tornan en mascaras de cansancio. Advierto que Paco de Maliciosa C.D. y yo llevamos un ritmo parejo desde prácticamente la subida a Bola, y decido engancharme a su rueda. A unos 5-10 minutos de la cumbre nos cruzamos con Prisi y Fernan que ya comienzan a descender. Éste será nuestro ultimo encuentro hasta la meta. Le deseo lo mejor....aunque ya que hablamos de brillo en los ojos, en los de Prisi se ve una determinación y fuerza que le llevarán a meta, seguro. Tras unos cuantos gritos de animo de Fernan que nos empujan hasta el vértice comienza un largo y algo torpe descenso a Cotos. Al principio dudo y algo miedoso voy midiendo los apoyos. Noto pesadez y mucha retención en la bajada, y eso se que me va a pasar factura en los cuadriceps. Miro hacia atrás y veo que Gontxu se va retrasando en la bajada. Intuyo que tiene problemas, pero debo seguir en mi carrera. Le doy las gracias silenciosamente y pienso en la bajada.

Un MAM es un reto muy personal, y como tal, tenemos el deber de disfrutarlo (sabias palabras de nuestro amigo Luis), pero no deja de ser una carrera, y como tal, mirar el crono y los ritmos es acto reflejo fundamentado. Voy cumpliendo unos tiempos muy optimistas.He invertido 1 hora y 35 minutos en la subida  y bajada a Peñalara, y por tanto, si el Muro de Cabezas de Hierro es benevolente conmigo, puedo rondar las 6h 30´ deseadas en el tiempo total.

Una vez en Cotos, llega otro momento que me dió mucho punch. Encuentro una vez más con Loc@s y Cachorros, y un speaker que rivalizaría con el famoso Depa. Luis ha enganchado el megáfono y como solo él sabe hacerlo, hace que te ponga la mayor sonrisa en la cara a pesar de los kms. Éste hombre se merece una ovación, y no la que él pide para los corredores.

Comienza el punto clave de la carrera: el acercamiento al Tubo de Cabezas y su ascensión.Se trata de unos 4 kms aprox. y 500 metros + . Al principio mucho ritmo ca-co y después a doblar riñones y sufrir. Pocos metros pasado el refugio de El Pingarron me encuentro con Fernan que ha decidido acompañarme. Es un gran corredor, muy experimentado y observador: sabe que estoy muy justo y que Prisi ya tiene un pié en meta. A mi sin embargo, se me escapan las fuerzas como si soltases un globo. Intento comer y beber pero las fuerzas me abandonan. El calvario que pasé para llegar a lo alto de Cabezas es antologico...vamos....que el famoso Tio del Mazo estuvo jugando conmigo cerca de una hora.

Pero contaba con ayuda. Tenía a Fernan, que me gritaba y alentaba como un poseso. Todavia se me erizan los pelos recordando sus palabrasy de verdad que siento mucha vergüenza por no haberte dado muchas respuestas. Estaba KO y que sepas Fernan que estoy deseando que me cuentes esas historias tuyas de la mili, o aquella de cuando tu hermano y tu  cargasteis con una chica con hipotermia...espero poder compartir muchos kilometros contigo y poder devolverte el gran favor que me hicistes. Creo que pude terminar gracias a que "un tio muy feo y con bigote que no aparecía en mi sueño" estuvo  a mi lado durante un monton de kilometros. AHHHH!!! y que no se me olvide!!! que es eso que suena??? no creo que sean dulces notas de piano o susurros de las montañas....NOOO!!!! son unos Locos...muuuuuuuu...LOCOS que con cencerro en mano y berridos que se escuchan desde la base del Tubo animan a todo bicho viviente.Que barbaridad!!


El siguiente tramo es otro que me traia muchas dudas, y es el que transcurre desde Cabeza Menor hasta Bola. Eso no es un camino,  senda o lo que sea....ES UNA PUTADA!! tal y como decía Prisi, parece que el suelo ha bajado unos centrimetros dejando al descubierto unas traicioneras rocas que buscan avidamente un mal apoyo. Se suma a ello más de 30 kms y 5 horas de vagabundeo por las alturas de la Sierra de Guadarrama con lo que la ostia se rifa y yo tenía papeletas para ganar. Tras un par de tropiezos me dejo el ansia viva para otro dia y bajo el ritmo. Ritmo que tampoco era muy boyante ya que además me entra un flato que me acompañará hasta el Puerto de Navacerrada.

Pero al final todo llega y tampoco quiero recordar ese tramo como un sufrimiento porque la belleza del paraje es enorme, la compañia es inestimable y el momento es único, y se que añoraré esos momentos también. Momentos únicos que no desestime un MAM.

LLegamos a Bola. SIIIII!!!!!! ¿¿Es posible?? ¿puedo dar por hecho que termino en Cercedilla? Yo creo que si. La bajada es larga y dura, y esto no ha acabado todavia. En el puerto un último y emotivo encuentro con los Loc@s y Cachorros antes de la meta con banda sonora de lujo: Himno del Atletico + ACDC. Que más se puede pedir??. Gracias Chorry!!.

En éste punto me tocaba seguir sólo hasta Cercedilla, pero Fernan decide que me acompaña y de verdad que se lo agradezco muchisimo, porque si no hubiese estado dandome varazos me habría parado en más de una ocasión. La bajada transcurre tranquila, sabiendo que el trabajo está hecho salvo no cometer estupidos errores. Es en éste tram odonde quizás haya puesto más atención aunque en algunos momentos quisiese apretar un poco.

Los cruces con el arroyo son un alivio para los maltrechos pies, y las salpicaduras  hasta la rodilla refrescan un cuerpo magullado y una mente amorfinada. Voy mirando el GPS en varias ocasiones, y me voy dando cuenta de que me he desviado de mi objetivo....pero no mucho. QUE COÑO!!! hacer un MAM en 7 horas para un novato como yo está pero que muy bien. Hoy el crono es secundario y ya habrá otras ediciones para mejorarlo.

Ya se ve el pueblo, ya atisbamos el polideportivo, ya se escuchan las voces. Un ultimo cruce del arroyo, ultima subida y entramos a la calle que tras un giro nos conduce a la gloria. El escenario es épico, glorioso y con espectadores de lujo: Locos, Locas,Cachorr@s y mi amada familia. Los ultimos metros los recorro con unos guardaespaldas de lujo: Kike, Fernan y Prisi y su hijo.
Pero ando buscando a los más importantes en mi vida: Ruth, Elsa y Aitor. Ya los he visto, y el nudo en la garganta se rompe, las lagrimas pugnan por salir en cuerpo ya deshidratado y mi rostro se muda en pura emoción

No se de donde saque las fuerzas pero entré en meta corriendo y derrochando el resto de fuerza que se merece. Ya tengo mi MAM....mi primer MAM.


Ya solo quedan abrazos, felicitaciones, una fria ducha y algo que tomar en el Asador de Angel. Siento no haberme podido quedar más timepo pero me dió un bajonazo brutal y lo mejor era descansar el cuerpo. Quizás la proxima se pueda alargar más tiempo y para entonces no sean simples Cocacolas...sino grandes jarras de cerveza con las que brindar por algo que nos une, nos potencia y nos hace indestructibles: la doble A.

En la sección de agradecimientos, como siempre, a vosotros, La Familia de Loc@s, en especial a Prisi y Fernan. Gracias a un Luis que he llevado en el pensamiento siempre y la fuerza pura y derroche de alegría de todos los demás.

Gracias a ti, Ruth, por apoyarme en ésta locura y darme tu apoyo.

Mi sueño se ha cumplido y no deseo despertar.

Un beso y un abrazo

PD: no recuerdo pagar la Cocacola en el Asador....la proxima ronda invito yo.


9 de junio de 2014

MAM 2014. El cencerro y el megáfono.

¡¡Pues ya está!!. Un MAM más finalizado y van...
La verdad es que este ha resultado un MAM muy especial. Está claro que todos tienen algo. Momentos únicos e irrepetibles. Pero, sinceramente este ha dejado unos posos la mar de interesantes y emotivos en mi.
Por un lado, lo primero, la pequeña "decepción" de que sólo fuéramos dos los Locos que afrontáramos la carrera. Uno piensa que si mantiene la fidelidad llegará un momento en que le toque correr "solo" ya que el reto estará cumplido para el resto. Claro que siempre quedarán conocidos con quienes coincidir, pero no será lo mismo que vivirlo y afrontarlo a través de la mirada de un "hijo". Vosotros sabéis a que me refiero.
Por otro lado, el tener tantos Locos liberados de la responsabilidad del dorsal ofrece unas posibilidades de animación bárbaras. Como he leído a Héctor, habéis marcado un antes y un después en cuanto a la animación de esta carrera y, sinceramente, por momentos uno desearía liberarse también y afrontarla desde ese lado... pero bueno, de momento pensaré que hay otras carreras para dar la talla como animador.
Más cosas. Mi hijo. Ufff, no quiero hacerme ilusiones, ni dejar volar la imaginación pero verle disfrutar de su minimam y, tenerle en cada control de Cotos, Navacerrada y meta me llena de orgullo y me hace estremecer pensar en vivir un futuro de kilómetros y quien sabe si un MAM a su lado. Pero dejemos correr el tiempo y ver que pasa. Tendré que sumar muchas ediciones hasta que eso llegue. Ese es todo un desafío.
Ahora la crónica de la carrera en sí tal y como la vivió este veterano MAMón.
La mañana prometía. El tiempo estaba despejado pero fresco y Héctor aunque nervioso transmitía seguridad en si mismo y eso me confortaba. Además contábamos con el inestimable empuje de un puñado de amigos a lo largo del recorrido. En la salida la primera sorpresa. El hombre que siempre está de chistes pero que no perdona el más mínimo detalle cuando de cuidar de los demás se trata. Luis en la salida. Para vernos, para animarnos, para transmitirnos el espíritu de todos los Locos. No estábamos solos. Su mensaje fue muy claro.
Salimos tranquilos, trotando mayormente. La verdad es que con pocas ganas de andar. A Héctor  le veo muy bien, como digo buscando los pasos entre la gente que se atasca en las primeras rampas y a un ritmo cómodo pero continuo vamos alcanzando la zona del Navalmedio. Llegamos a los campamentos y la tónica es la misma. Ritmo acompasado de ambos, sin tirones, sin excesos, pero de trote continuo hasta comenzar los cruces del arroyo y las primeras exigentes rampas. Caminamos poco, la verdad es que pensaba que Héctor iría más conservador en este tramo pero veo que va fácil y resuelto. También ayuda una cosa. No hay tirones, es ritmo es pausado y constante. Así sin quererlo nos acercamos al puerto donde la idea de encontrarme con mi hijo hace que me separe un pelín de mi compañero. Avituallo y no le veo, pero al cruzar la carretera aparece junto a los grandes Chema y Carlos. También están Biri y Gonchu que se unirán a nuestra aventura. Llevamos una hora.
El camino hacia el emburriadero seguimos trotando. Aquí me vienen pensamientos de la última vez que pasé hace unos días, cuando me tuve que separar de Alberto, Rafa, Biri y un Bandolero porque mi cuerpo no podía subir hasta Bola. Apenas habían pasado 10 días desde entonces que tenía que caminar y hoy que trotaba fácil. Afortunadamente. En la subida hasta la pista de hormigón y a Bola Biri y yo nos separamos un poco de Héctor y Gonchu. Mucho no, pero unos metros. Sé que poco después me cogerán y además ahí están los pomponeros de Lluvio, Chorry, Dioni, Rafa y Kike. Toca bajar al Noruego. Con prudencia, pero afortunadamente sin dolor como el pasado año. ¡¡Por fin!!. Alberto me pasa como una exhalación en varias ocasiones para hacer fotos (quién tuviera sus patas) y Héctor me grita pocos metros más atrás amenzante que "me va a crujir vivo". ¡Bien! buena señal de que está cerca y entero.
Llego a Cotos, donde de nuevo me encuentro con las Locas, Locos y Martín. Abrazos, besos, saludos y Héctor que aprovecha para pegarme un hachazo en el avituallamiento, jeje. Cuando quiero darme cuenta está casi subiendo los escalones que conducen a la senda de Citores. Biri y yo arrancamos y en pocos minutos estamos agrupados. Vamos a un ritmo suave, controlado. Pasamos un grupo de senderistas donde una de ellas no encontraba no se qué en sus mallas ¿la ayudamos Biri?. De repente, sin querer Biri empieza a destacarse un poco, va dando gritos y animando a todos los corredores que le preceden y siguen, me alegra verle tan feliz. Poco a poco le sigo, me encuentro de lujo. Llegamos al avituallamiento de Citores y trotando más que andando vamos hacia Peñalara, a pesar de las piedras, a pesar de la altitud. Soy consciente de que el hueco con Héctor ha aumentado. Mi idea primaria era llegar hasta Cotos con él, pero ahora soy consciente de que no merece la pena esperar y desperdiciar así las fuerzas gastadas. Como no me voy a volver loco tirando hasta la cima y menos aún en la bajada decido seguir y ver si nos juntamos o no en Cotos.
Cuando corono Peñalara y bajo veo que mi distancia con Héctor no es tanta. veo a Gonchu por detrás y eso me preocupa porque no esperaba verle descolgado. No debe tener un buen día. Durante la bajada me voy examinando respecto al pasado año, fue a partir de aquí donde comencé a pasarlo realmente mal. Este año la rampita de Dos Hermanas la hago corriendo (buena señal) y puedo bajar sin dolor. De repente comienzo a tener un molesto flato, respiro y aguanto, me pego unos acelerones que me devuelven la confianza y la respiración. Así sin quererlo me veo llegando a Cotos donde aparece mi hijo y el gran Luis con un megáfono, dando unas voces y diciendo tantas cosas seguidas que me da la impresión que se me queda tieso sin respiración en cualquier momento. Las lágrimas casi se me escapan con semejante cuadro, pero creo que me libra la preocupación por mis oídos jejeje.
En este momento ya tomo conciencia de que mi carrera es independiente de la de Héctor. Los kilómetros dirán si volvemos a juntarnos o no, pero yo ya me voy a por la meta. Con permiso de los tubos claro. Dejamos Cotos y en la nueva senda de este año subiendo la cuesta saludo a Ricky, Alex y de nuevo a Kike que no necesita megáfono para hacerse escuchar. Biri me acompaña un trecho pero al poco de cruzar la carretera que ya me llevará a la base de cabezas me comenta que prefiere esperar a Héctor ya que piensa que los tubos se le harán más duros que a mi (por la experiencia que conste). Le agradezco la compañía y los ánimos prestados y decidido me voy en busca de la gloria y del suplicio. En la zona de aproximación a los tubos ya veo que no voy tan bien como me gustaría. Mi trote es lentorro a pesar de tener terreno corrible en ocasiones. Quizá haya gastado demás en Peñalara. Quizá la falta de entrenamiento en las semanas de atrás ahora pasen factura. El caso es que no me voy a arrugar y a mi ritmo, aún gano alguna posición. La subida se me hace un poco más penosa que otros años. Aquí ya tomo conciencia de que lo que queda es llegar, olvidándose del reloj y de las sensaciones. Alcanzar la meta. Pasito a pasito alcanzo la zona donde los Bandoleros están animando a los corredores. Avituallo en el caño de la fuente y sigo y al poco, comienzo a escuchar música celestial... son mis amigos, sus voces de ánimo y de fondo una música que me recuerda que hay que ser valiente y noble, derrochar "coraje y corazón" esta es para mi la frase de las frases del himno de mi Atleti y gracias a un madridista de 10 la estoy escuchando. Eso y un cencerro que me acompañará unos cuantos kilómetros de ahí en adelante. Así que derrochando coraje y corazón me voy a su encuentro para darles los abrazos que merecen y coronar Cabeza de Hierro.
Ahora viene el tramo trampa. Ese de múltiples piedras en el suelo que parecen levantarse a tu paso para que tropieces. Aunque realmente son las piernas las que no suben ya lo suficiente. Las piedras son testigos solemnes e inanimados de nuestra esforzada batalla. Aparece de nuevo el avión que es Alberto, ruidoso con el cencerro, generoso con las fotos. Agradezco enormemente su compañía, por ser él. Le aprecio enormemente y en cierta forma admiro la forma en que ha crecido como corredor y sobre todo como persona. Convirtiéndose en un líder para muchos. Así alcanzamos Bola por última vez. El viento ha sido realmente molesto este último tramo. Por momentos no me permitía  respirar por la nariz y me estaba provocando un gran dolor de cabeza (pensaré que era esto y no la suma de megáfonos y cencerros). Comenzamos el descenso. Al poco el viento amaina y la temperatura sube. Mi hijo aparece esperándome en el tramo final que lleva hasta el asfalto del puerto. Otra vez la emoción viéndole. Alberto se queda allí. Me da los últimos ánimos y cencerrada una vez que le confirmo que voy bien y que llego en solitario sin problemas. 
Ahora ya está, ya sé que solo queda dejarse caer y llegar a la meta. Comienzo el descenso rodeado de pensamientos, disfrutando de la soledad. Voy perdiendo puestos, algunos, pero no me importa, mi meta es otra, es propia. Alcanzo los campamentos recreándome en cada paso del arroyo y recorro en total soledad los últimos 3 kilómetros del recorrido. Ya escucho al Speaker. Ya veo la pradera final. Ya asoma la última cuesta por la que bajó mi hijo el día anterior. Cruzo el arroyo y asciendo la última cuesta. Allí está Martín de nuevo, como el año pasado. Impaciente. Me anima a correr aunque yo camino un poquito. Me falta un poco el aire. Noto el calor. Cruzo la verja y ahora sí ya arranco a trotar. Empiezan a asomar amigos y voces y al fondo la meta. Ultimo giro, las Locas animando, mi mujer aplaudiendo y entrada triunfal en compañía de mi chaval. Sencillo y emocionante. Simple y pleno al mismo tiempo.
Ya sólo queda repartir de nuevo abrazos y besos. Disfrutar de la meta, de los amigos y esperar al valiente compañero. Héctor Corazón de León. Me comentan que pasó unos 40' después de mi por Navacerrada. Ha pasado un rato. Me voy a su encuentro. Se lo merece, se lo debo. Hay sueños que hay que cumplir y yo tengo que hacer realidad el suyo. Le animo. Le aplaudo. Le presto mis respetos y mi admiración y una vez que ha cruzado la meta le doy el abrazo que se merece. Ya no es un corremontes más. Ahora es un MAMón. Su forma de afrontar los futuros retos no será la misma. Su vida deportiva tiene un antes y un después y lo sabe.
Finalmente gracias, gracias, gracias a todos y cada uno de vosotros. Por todo. Disculpadme si me dejo a alguien sin nombrar. Si en el reparto de momentos o protagonismo algo se me queda fuera. Os lo he dicho muchas veces y una vez más lo repito: soy enormemente afortunado de recibir el cariño que me mostráis. Orgulloso de sentirlo sincero. Y, aunque pueda sonar pretencioso a veces me hace pensar que tan mal no lo estaré haciendo en esta vida cuando me premia con amigos como vosotros.
Un abrazo queridos Locos.

PD: Tengo un montón de ideas, proyectos, ilusiones bullendo en la cabeza en las que vosotros sois parte fundamental. Las iremos hablando y comentando. Porque esta crónica ya comienza a cruzar el umbral del mamotreto.



7 de junio de 2014

Una vez más volverá a ocurrir

Sí, ya sé que siempre estoy con la misma historia a cuestas, pero creedme cuando os digo que es de lo más bonito que he visto en esta locura nuestra y de lo que más me llena. Pues claro, me refiero al brillo en la mirada, a qué me voy a referir si no. A esa mirada perdida hacia el primer gran objetivo, Bola. A esa mirada que escruta uno a uno a los corredores que te rodean momentos antes de tomar la salida. Esa mirada que conecta con la tuya cuando le gritas desde detrás de cualquier recodo al verle, le aúpas y le animas, te haces cómplice y abnegado envidioso por no estar ahí también. Esa mirada es especial.
Esta noche vuelve a ocurrir, noche tornada en antesala del gran “paseo”. Vuelta tras vuelta en la cama te obliga a pensar continuamente que debes dormir pero no puedes. Te gustaría que llegara ya el momento de despertarse pero se hace eterno. El tiempo es caprichoso y esta noche está de antojo, irá poquito a poco. Muy poquito a poco. De esta noche tendrás que aprender que la carrera será igual. O quizá no, porque mientras estés con las manos en la masa tendrás que disfrutarla en cada paso. Es tu obligación respirarla, sentirla, saborear cada sube y baja, cada giro del camino, cada suspiro, cada exhalación. Porque lo que aún no sabes es que la exigencia de la carrera no está en lo físico, sino en la obligatoriedad de disfrutarla a tope, exprimirla en lo espiritual, porque una vez que hayas terminado ya nada será igual. Tu mirada habrá cambiado, en ella se perpetuará el brillo por siempre y ya no podrás para de buscarlo en los demás, porque el MAM es mucho más que el MAM.
Héctor, es cierto que mañana la carrera te exigirá que des el máximo, pero ese máximo será sencillamente que cada paso que des te haga feliz, que charles con todos los voluntarios en los avituallamientos, que intercambies sensaciones con otros compañeros, que sonrías a todas las cámaras y que nos abraces a todos los que podamos acercarnos a verte, aunque sea un minuto y, lo más importante de todo, que te guardes las lágrimas para el final, cuando la pequeña mano de Elsa te recorra la espalda fundiéndote en un abrazo y cruces la meta con ella en brazos, beses a tu compañera de viaje en esta vida y mires a los locos que estén, los mires con ese brillo especial, el brillo de quien ha sido finisher en el MAM.

P.D.: No se lo digas a nadie, aunque ya lo sabes te recuerdo que las montañas hablan y mañana lo harán contigo. Escúchalas, seguro que incluso en alguna de ellas descubres la música que el pianista dejó impregnada un tiempo atrás. Yo aún la disfruto alguna vez, cuando el aire sopla del norte y pasa por la sierra.

Pre-crónica de mi primer MAM...a new kid in the block

Me enfrento a éste texto con ciertas pretensiones, pero sin infulas de dejar palabras estimulantes de cara al dia de la carrera. Puede sonar descarado, pero creo que me entendereis. Uso éste blog para plasmar en pequeñas, simplesy desordenadas pinceladas los sentimientos y sensaciones que a dos dias escasos ed carrera recorre mis entrañas.

Quiero agradeceros enormemente todas y cada una de las cronicas que habeis dejado escritas en el blog; blog que sin duda, es parte de mis pensamientos desde hace muchos kilometros en mis entrenamientos. Os conozco antes incluso de poneros cara y nombre. Me he reido, emocionado y apenado en muchos de vuestros relatos. De eso hace ya varios años, cuando seguía con ansiedad cada capitulo y andanza de un picaro korrekolari con es Mikel. Me he reido a carcajada con las salidas de un tal Hermano de ALex (jijijiji). Momentos de sobriedad y solemnidad frente a la maestria de un tal Prisillas o Fernan. Dolor y congoja tambien han tenido cabida....pero siempre sobrepuesta por la fuerza que tira de éste grupo: LA DOBLE A.

Como agradeceros todos esos momentos, esas risas, esas "pastillitas para soñar" que son vuestros deseos. Creo que ya se como hacerlo. Yo os dedico mi MAM. Os dedico el gran esfuerzo que voy a realizar. Porque...¿ como iba a lograr tan mayuscula gesta si no es por vuestra compañia, vuestras palabras de animo...hasta vuestras pequeñas puyas.? .Porque sois un reflejo de lo que he ido consiguiendo estos meses (gran reflejo, ya que alguno estais a un nivel muyyyy alto).

Eso si, debereis compartir éste triunfo con las personas que ha soportado salidas y ausencias en éste ultimo año.Lo que más quiero en ésta vida: mi mujer y mis dos hijos. A ellos les debo esa fuerza que hace que pegues el ultimo brinco en la más alta peña, el extra de vitalidad en la larga pista y las pulsaciones de reserva en el último sprint. Les debo la vida, LA VIDA!!! porque correr me da más color a mi vida.

He dicho triunfo, si...porque voy a triunfar. Lo he soñado. Empezamos tranquilos, a ritmo suave. Noto cierta pesadez y tirantez en los musculos de las piernas. La respiración algo forzada. Vamos carburando poco a poco. Noto que Prisi coje un ritmo algo más elevado, pero yo voy a lo mio. Él es un corredor experimentadoy se que debo estar cerca de la barrera. De pronto estamos en el Puerto de Navacerrada, cansado pero mejor ajustado que al comienzo, y como si de un nuevo comienzo se tratase, afrontamos la subida a Guarramillas. Mis sueños se entremezclan con las vivencias de otros corredores, de amigos que han estado aquí en otras ediciones. Vivencias que gracias a su buena prosa y mi ansiada lectura las toma casi como propias. Hago una peregrina bajada por las Lomas del Noruego y una fugaz y aún interrogante subida a Peñalara. Conozco bien el terreno. Mi memoria fotografica en la montaña siempre ha sido buena, y eso me da seguridad. Siento que estoy como en casa. La subida a Cabezas de hierro es todo piedra (grandes y pequeñas como bien decía  Mikel), larga, empinada, a la solana, seca,...hermosa. Otro tramo de color gris hasta Guarramillas....

BOOMMM!!! algo explota. Algo tiembla. Es mi alegría!!!! Ahora a bajar...y de tranquis. En mis sueños atravieso anchos rios y verdes prados. Se que no es así. Que es una larga y dura bajada en la que perder la concentración puede conllevar una caida, lesión y lo que ahora me aprece peor...un adios a mi triunfo. La entrada en meta es con una liberación de alegria,rabia y fiera determinación. Lo hago de la mano de mi fiel compañera finisher: Elsa. Siempre mirando a los ojos a mi mujer...y porque no. Una gran bandera azul de Los Locos del Cerro ondeando en lo más alto. Y en primera fila el puto amo de los montes, el maestro entre maestros. Un MEGAsuperviviente incombustible con una mente más afilada para éste deporte como pocas veces se ve: Prisillas.

Ese es mi sueño....y se hará realidad. Y estareis allí...algunos de cuerpo presente, otros en mi pensamiento.


No tengo más que decir.

Para más adelante tendreis una cronica más real...pero espero que no muy alejada de la que acabo de describir.

Nos vemos allí arriba....en la montaña.

Gracias