29 de marzo de 2010

Esto es lo que busco

Después de leer estos últimos días la salida de Mavegam por los dos depósitos, a Prisillas pidiendo selva o monte en su defecto, el precioso homenaje al noble Grijalvo, y alguna cosa más, el cuerpo me ha pedido marcha al amanecer, como no puede ser en otro momento.

He ido al Cerro que me estaba esperando, ebrio de luna que diría Delibes. Rumores de agua por todas partes y PAZ absoluta. Necesitaba correr así. Al volver, Villalba se despertaba como brotando de la tierra en la Dehesa.

Esto es lo que más me gusta. No pido más que esto y vuestra compañía de vez en cuando.

24 de marzo de 2010

Los Dos Depositos del Moral

 Retomo mi participación en el blog con una ruta, "los dos depositos del Moral", es una ruta de las que me gustan mucho, con una longitud de 16 kilómetros y un par de repechines.





 La ruta comienza en el colegio Laude de Moralzarzal, desde allí nos dirigimos hasta la Cañada Real y siguiendo esta llegamos al primer "repechín", la cuesta del camping que nos llevará hasta el primer depósito, una vez arriba tenemos un terreno de toboganes con unas vistas impresionantes de toda la Sierra del Guadarrama. Bajada vertiginosa hasta el campo de tiro y dos o tres kilómetros más o menos llanos hasta la urbanización El Retamar, donde comienza la segunda y última de las subidas del día, la de nuestro querido Cerro del Telégrafo. Es esta una subida por pista, de dureza media pero bastante larga, en torno a los cuatro kilómetros, hasta el pilón, una vez allí cogemos la "senda de los cazadores" hasta el segundo depósito. Desde allí solo queda bajar hasta el pueblo de Moralzarzal y volver al punto de partida.

16 de marzo de 2010

¡Desperta ferro!.

¿Donde están mis locos del cerro?.
Poco queda para que el cambio de horario llegue y entonces todas esas sendas mullidas por las lluvias y por la hierba se abriran ante nosotros. Barro, piedras y charcos para disfrutar de las lluvias y del deshielo.
Os imagino espectantes, afilando el taqueteado de las zapas, revisando esos cordones gastados, desempolvando el uniforme de batalla.
Este año la épica nos llama a todos en batallas extenuantes de 7 o 15 horas, donde tendremos que dar lo mejor de cada uno de nosotros, donde pondremos nuestro tobillo por el del compañero maltrecho para llevarle en volandas a la victoria. Donde nos abrazaremos en piña en Cercedilla y en Beasain.
Como aquellos ferozes guerreros que al grito de ¡ desperta ferro ! se lanzaron a la conquista de tierras lejanas.