29 de septiembre de 2009

Arreón.

Ahora mismo Kilian Jornet con más de 30 horas de carrera está luchando por bajar un nuevo record en un recorrido de Ultra distancia en los USA, para las 9 am parece que está previsto el final de su aventura.
Ahora mismo que aún a estas horas por las calles de cualquier ciudad de nuestro pais cientos de corredores sacan su entrenamiento adelante.
Ahora mismo algunos de nosotros nos encontramos doloridos y convalecientes por lesiones o virus malévolos sufridos.
Ahora mismo es el momento de soñar el próximo entrenamiento.
De recordar las vistas desde el mirador de las Canchas después de esos largos 24 minutos de ascenso.
De revivir las vertiginosas bajadas por el Calvario.
De esperar esos últimos 195 metros del próximo maratón con las imágenes de nuestros mejores 195 metros pasados.
De repasar cada uno de los chistes que nuestros compañeros nos contaron en los últimos entrenamientos.
De sentir la bendita soledad de las calles en invierno.
De imaginarnos todos juntos cruzando campos, saltando piedras, pisando charcos, abrupándonos en la ventisca, estirándonos en la bajada, evitándonos en el spring y, esperándonos en el desfallecimiento, sosteniéndonos ante tropiezo, ayudandonos tras la caida.
Ahora mismo es momento de venirse arriba porque sois grandes, sois buenos, sois únicos.

28 de septiembre de 2009

Desilusión

Siempre he hablado de que lo importante es el día a día, de que la carrera es solo el final de un proceso repleto de sacrificios y alegrías, y que es de este proceso del que debemos disfrutar. Pero es la segunda vez este año que me pierdo una carrera importante para mí, primero fue el MAPOMA, meta de juventud que tuve que ver desde la cama, y ahora la Panes-Potes, carrera a la que tengo gran cariño y que además me iba a dar una idea de mi evolución, ya que sería la primera carrera que repito desde que empecé a correr. Y tengo que reconocer que esta vez me ha dejado tocado, uno empieza a preguntarse cosas que hasta ahora ni siquiera se había planteado y se responde con grandes tonterías o grandilocuencias sin sentido. Como todo, sé que esta situación va a pasar y que en cuanto recupere algo de fuerza volveré a los caminos, pero…

Por otro lado, tengo que felicitar a Don Fernando, al cual dejé tirado en un desfiladero, perdóname amigo, porque ha destrozado mi "record" de la carrera, como me hubiera gustado acompañarte. Luisete me da menos pena, creo que no le dolió demasiado quedarse en casa ¡hay que trabajar menos!

Por cierto, os pongo una foto del culpable:

Photobucket

25 de septiembre de 2009

Recordando viejos tiempos

No es por el Cerro, pero es un camino que todos conocemos. Ayer me dio por ir por allí. Recordé que Pepe-despacio me dijo el domingo que anduvo por El Campillo y quise ver cómo estaba. Hacía tanto tiempo...
Estos son los datos del entreno: http://connect.garmin.com/activity/14204769
Y vosotros, qué pasa... ¿por dónde andáis?

23 de septiembre de 2009

Buenas sensaciones

Ayer tuve descanso obligado. Aunque reconozco que me ha venido bien.
Esta tarde, 23km desde mi casa al Cerro. Me he sentido fenomenal. Eso sí, a mi velocidad.
He ido con Arturo, al que le hecho de liebre. Incluso he tirado un poco de él porque le he visto un tanto flojete, para la bestia que atesora.
Bueno, os dejo aquí los números: http://connect.garmin.com/activity/13959818
Estoy probando el forerunner 310XT. Hoy ha funcionado como el culo el pulsómetro...
Bueno, me piro a la cama.

21 de septiembre de 2009

Nos vamos pa' Sevilla

Totalmente decidido. Pienso ir a Sevilla en febrero, así que manos a la obra.

Domingo. Voy a intentar hacer el primer entrenamiento progresivo, es lo que va a tocar durante los domingos de los próximos cinco meses. La intención era hacer 90', 18 km.

Desde casa hasta Romacalderas he ido de noche y empezando a amanecer, después, ya amaneciendo, he seguido hacia el camping de El Escorial. Sol de espaldas y, frente a mí, se iba iluminando toda la falda Sur de la sierra: Abantos, Cuelgamuros, Cabeza Líjar, Alto del León, Montón de Trigo, Siete Picos, La Bola del Mundo, Maliciosa, Cabezas de Hierro,... todas las montañas en fila. Muy bonito.

Bueno, os cuento como me han ido saliendo los km:
1.- 6:06, muy despacito, colocándome, las llaves que hacen ruido, en fin, despacio
2.- 5:11, cuesta abajo, este no cuenta para el progresivo
3.- 5:28
4.- 5:32, más lento que el anterior, esto no debería ser así.
5.- 5:15, ya voy por el campo
6.- 5:11
7.- 5:19
8.- 5:21
9.- 4:58 ahora empieza lo bueno
10.- 4:50
11.- 4:45
12.- 4:28 demasiado rápido
13.- 4:50 pagando por haberme pasado en el anterior
14.- 4:47
15.- 4:19 fenomenal
16.- 4:06 cuando voy demasiado deprisa, la rodilla izquierda suele avisar de que está ahí; hoy también ha avisado, así que decido bajar el ritmo a partir de aquí, tampoco doy para mucho más después de 16 km.
17.- 5:08 a este ritmo, después del anterior, te parece que vas andando.
18.- 4:54 y suerte que me encontré a Ppong, porque ya llevaba el corazón pidiendo la hora.

Descalentamiento hasta casa. Ducha, litro de Aquarius, zumo de naranja, café con leche y dos tostadas con aceite me han dejado en 73,9 kg. Como un bendito.

19 de septiembre de 2009

Un paseo por Burgos: de Cerro a Cerro

Esta mañana, ya que ayer el día no invitaba mucho a correr, me he levantado decidido a rodar a mi aire un buen rato. Estaba en un pueblo de Burgos que se llama Huerta de Rey que tiene una bonita zona de pinares. Hacia allí me he dirigido. Tras dos kms. de carretera, he enfilado una pista en continua subida hasta remontar, por unos parajes preciosos de pinos negrales y albares, la cota más alta de este pueblo: el Cerro, o para ser más exactos, la loma que me lleva hasta él. Son 7,5 kilómetros de subida en total a los que hay que añadir otro par de ellos cresteando por un enorme cortafuegos.
Hecho esto y con niebla abundante he iniciado la bajada sin estar muy seguro del camino por lo que he acabado en una pista 'ciega' que me ha obligado a ir campo a través. Como me conozco la zona he visto casi enseguida un pista conocida por la que he vuelto al pueblo no sin antes hacer otros cuatro kms. de asflato. En total, casi 17 kms. con una pequeña ampolla en el pie desde el km.10. Pero como dijo el que lo dijo: 'sarna con gusto...'

16 de septiembre de 2009

Los montañeses bajan al valle.

Con la llegada del invierno se produce la habitual transhumancia de la gente y bestias de la montaña a los valles en busca de temperaturas menos hostiles y de un habitat donde esperar el regreso de la primavera y los verdes pastos.
Y, como es habitual desde siglos las gentes del llano desconfían de esos hombres rudos a fuerza de luchar contra la naturaleza y fruto de la soledad de las cumbres.
Pero el ser humano se adapta con rapidez y en menos que canta un gallo nuestros montañeses se adaptan al llano, sus costumbres, su terreno y sus ritmos.
Y, aunque es normal que en los bailes de fin de semana, sus primeros pasos resulten torpes y hoscos, en poco tiempo las mismas piernas ganan en agilidad siendo capaces de seguir la música que suena en la pista.
La fuerza de los desniveles acumulados, los saltos entre piedras, la bajadas vertiginosas harán que sus pasos resulten firmes y rotundos.
Los montañeses bajan al valle. Ya nos esperan las pistas de tierra, es asfalto y el tartán. Tardaremos algo en adaptarnos pero no bailaremos con la más fea.
Que recuerdos ¿verdad?:

15 de septiembre de 2009

Corriendo en Becerril

Tengo que reconocer que en principio no me hacía mucha ilusión correr esta carrera, el año pasado también corrí un 10.000 dos semanas antes de la Panes-Potes, son carreras muy agónicas que me dejan las piernas bastante tocadas y no me dejan entrenar a gusto. Pero la idea de compartir una mañana con la gente del club y bastante cerca de casa me hizo cambiar de opinión.

La mañana era muy buena para correr, por fin parece que el verano ha dado una pequeña tregua y el calor era soportable. Nada más empezar, mientras busco mi lugar en el grupo, me doy cuenta de cómo Prisillas se pone a tirar muy fuerte, al igual que en la carrera de las Dehesas, poco a poco llego a la altura del grupo pensando en que esta vez no me iba a quedar, ya que solo eran diez kilómetros, había que poner algo de calidad.

Así pasa el primer kilómetro, subiendo a 4:07, en el segundo, durísimo, el ritmo "baja" hasta los 4:38, llegamos entonces a la zona en la cual se debería poder correr pero un suelo de piedras con varias curvas de lo más "amigables" no permiten disfrutar de una bajada continuada, tercer kilómetro en 4:08, finalmente, en los dos últimos kilómetros de la vuelta, por terreno cómodo, en ligero descenso aunque con pequeños toboganes que rompían el ritmo, conseguimos bajar la barrera de los 4 minutos por kilómetro.

Durante la vuelta se va desgranando el grupo formado en un principio, primero Prisillas, que perdió unos metros, pocos, pero suficientes para no poder engancharse de nuevo, y al final de la vuelta Fernando y yo, que vimos como ni siquiera Víctor pudo contestar el arreón de Melchor, quedando en tierra de nadie.

En la segunda vuelta cierto sufrimiento, haciendo los kilómetros 15 segundos más lento que en la primera, con un segundo kilómetro en el que no me hubiera importado bajar algo más el ritmo si Fernando me hubiera dejado, pero sus ánimos y viendo que manteníamos posiciones tanto por delante como por detrás hizo que apretara un poco los dientes y aguantara un par de kilómetros más, guardando un poco para el último, en el que intenté imitar al gran Ppong con un sprint realmente divertido en el que aprovechamos para devolverle la pelota al único corredor que había osado adelantarnos durante esa segunda vuelta.

Tiempo final de 42:37, lejos de mi mejor marca, pero contento, sobre todo teniendo en cuenta la dureza del circuito… y la facilidad del que me sirvió para bajar de 40 minutos ;-).

14 de septiembre de 2009

Más vale tarde, que nunca

Pues como dice el dicho: "Más vale tarde que nunca". He decidido hacer una rápida referencia a la carrera de Las Dehesas que para mí fue la confirmación de que en este tipo de rutas por el monte, a pesar de su dureza y de lo que sufro, es donde mejor me encuentro.
Antes de empezar no me encontraba nervioso como me pasa en muchas carreras aunque para mí no dejaba de ser un test importante para ver mis posibilidades. Comencé muy tranquilo dejando que las pulsaciones subieran lo más lentamente posible y yendo a ritmo lo más cómodo posible para mí. Pasado el primer tramo de calzada y cruzada la carretera que sube hacia el Mirador de la Reina, comienzo a encontrarme bien por lo que sigo al mismo ritmo hasta casi el puerto de la Fuenfría donde decido andar unos doscientos metros para relajar piernas. Durante toda esta subida, la siguiente del Cerro Minguete y la última de Montón de Trigo no hago más que pasar lentamente corredores. Me ayuda mucho conocer perfectamente el recorrido y haberlo subido muchas veces. Al principio de Montón me encuentro con un animado Arturo que me da muchos ánimos y me comenta que voy muy bien posicionado. Es a partir de aquí cuando decido empezar a tomarme en serio la carrera porque me encuentro muy bien y veo que la mayor parte de la gente está relativamente cerca.
Cumbreo sin pena ni gloria y empiezo a bajar hacia Tirobarra con ciertas molestias de estómago (algo de flato por haber bebido en exceso) que no me abandonarán del todo hasta el final. Primera sorpresa, estos titubeos me han hecho perder de vista a toda la gente que iba por delante con lo que me doy cuenta de que todavía tengo mucho que mejorar con respecto a las bajadas. No me desanimo y bajo todo lo rápido que puedo sin pensar en los demás.
Llegando ya a la carretera que da a las Siete Revueltas, me pasa Beatriz a la que decido seguir para que me sirva de referencia y, en efecto, lo hará varios kilómetros hasta que las fuerzas me fallen. Es entonces cuando me doy cuenta de una segunda mejora que tengo que entrenar: no me quedo en las cuestas empinadas, donde sigo andando a ritmo aunque más cansado, sino en las zonas que pican un poco hacia arriba donde sólo las inestimables palabras de aliento de un incombustible Arturo, me permiten ponerme a trotar a pesar de las ganas de seguir andando. Así afronto toda la segunda tendida y larga subida sin ver a nadie detrás y perdiendo poco a poco a Beatriz. De nuevo en el puerto paso a un derrumbado corredor y veo que las piernas me responden mejor de lo que pensaba. Como buen reservón que soy no hago mucho caso de Arturo que me pide más marcha porque sé que queda pista suficiente para desfondarse y sólo empiezo a aumentar el ritmo cuando 'huelo' cerca el Collado de Marichiva donde empiezo a bajar a tumba abierta: el revolcón que me pego y el paso de un corredor mientras me reponía me dan las fuerzas y la rabia suficiente para recuperar el terreno perdido y pasarlo sin piedad procurando dejar la suficiente distancia entre los dos como para poder disfrutar de una entrada tranquila en meta. La vista de dos corredores muy hundidos y a los que recorto con facilidad terreno, no me permite relajarme aunque no consigo cogerlos por unos poquitos metros antes de entrar en meta. Ha merecido la pena todo el esfuerzo de este verano y el de la pasada primavera por estos montes. La preparación de prisillas me ha dado una fuerza que ni yo mismo esperaba.

12 de septiembre de 2009

G2H: ¿POR QUÉ?

 Muchas veces me han dicho que estoy loco desde que he empezado a correr, poco a poco he conseguido que la gente que me rodea piense que correr una media maratón es algo sencillo, incluso les empieza a entrar en la cabeza que lo del maratón no es para tanto, pero ha llegado un momento en el que ya, a parte del consabido "a ti te falta un hervor", he sentido como me miraban con preocupación y he recibido una pregunta que me está dando vueltas a la cabeza... ¿por qué?

 En ese momento me dí cuenta de que no lo sabía, ¿qué es lo que hace que me embarque en semejante aventura?

 Como supongo que como para muchos de nosotros, para mí también la rutina es un enemigo a batir, tenemos familia, hijos, trabajo e hipoteca, una edad nada emocionante, con un pasado seguramente interesante y un futuro bastante previsible, lo cual es bueno, muy bueno, pero hace falta algo de pimienta para lograr esa felicidad completa que todos buscamos. En este punto es donde entra la importancia de los retos, el evitar atocinarse y convertirse en un ser gris de esos que todos vemos a nuestro alrededor, de esos que pasan por la vida sin pena ni gloria.

 Y no es que busque glorias y victorias de cara a los demás, nada más lejos de la realidad, pero quiero vencer mis retos, esos que un día te propones, sin saber muy bien porqué, y poco a poco, con esfuerzo y sacrificio, vas logrando. Es importante para lograr un buen nivel de satisfacción el que todos esos retos sean posibles, y para ello el atletismo de fondo es un gran aliado, es un deporte en el que además de competir con los demás, puedes competir contigo mismo, un deporte en el que llegar el último a la meta puede suponer el mayor de los éxitos, un deporte en el que al final dependes de ti mismo, te pueden ayudar, entrenar y apoyar, pero el maratón lo acabas corriendo tú.

 ¿Donde está el límite? Lo bonito, lo espectacular... es que no exista ese límite, pero superar esos supuestos límites requiere una serie de condiciones, por eso considero que, al menos en mi caso y en este momento, si hay límites. Límites en lo referente al esfuerzo que estoy dispuesto a hacer, esa vida previsible de la que hablaba antes me gusta mucho y no quiero romperla, solo complementarla. Y por otro lado, quiero divertirme y disfrutar más o menos a mi aire, sin terribles planes que me tengan atado a un tartán.

 Creo que esto viene a que se supone que la evolución natural del corredor es hacía una disminución en los tiempos, al correr más rápido... pero yo no me veo así, no me apetece batir mis records en medias o enteras maratones, creo que me iba a suponer mayor esfuerzo que satisfacción, al contrario que el ultra, algo que hace año y medio no sabía que existía, pero cuando empecé a correr me cautivó, la UTMB, Sables... auténticas aventuras con las que empecé a soñar... 

 ¿Y qué mejor que hacerlo en casa?, Un importante motivo para correr el G2H: todas esas carreras se hacen lejos de aquí, se necesita mucho tiempo y mucho dinero para correrlas, el "Ehun Milak" se corre aquí al lado, no hay todavía precios de inscripción, pero espero que este lejos de ese medio millón de pesetillas que nos cuestan las "clásicas". Jeje, se me escapado que el gran proyecto a largo plazo es la otra carrera, la larga... de momento no me veo preparado para los 167 kilómetros, y ya tengo otro motivo para los 84 del G2H, preparar el objetivo total.

 Ya van dos, ahora la tercera, me apetece mucho prepararla, buscar esas "pequeñas" excursiones que nos harán conocer buen número de caminos hasta ahora poco utilizados, ver pasar los kilómetros en solitario y por supuesto, disfrutar de esa doble A que es lo que ha terminado de engancharme a "la locura de correr". Cuatro, no voy solo, el Gran Prisi me acompaña, lo que va a restar mucha dificultad al reto, pero va a aportar mucho más de lo que incluso ahora estoy pensando, como todos sabéis, es una persona muy especial y va a ser un honor perseguirle por tierras vascas... además de conocer a todos esos amigos que tiene por allí... ¡no veo el momento!

 Y supongo que muchos más... pero soy del sur de Bilbao, así que lo resumo fácilmente.... ¡¡¡ porqué me sale de los.... !!! *


* : dedicado a todos aquellos que no quieren entender por mucho que se les explique.





 


8 de septiembre de 2009

Decíamos ayer...

No las tenía todas conmigo cuando me apunté a la carrera de Las Dehesas.

Había enfocado el verano exclusivamente a correr, lo que se ha venido a denominar, carreras por el campo. Es un concepto de carrera que me encanta. Algo, lo menos que se pueda, de asfalto y el resto pues... ¡por el campo!

Pero, de pronto, pocas fechas antes me vino el yuyu. Sentí que tenía que afrontar seguir luchando por correr en la montaña. ¿Por que luchar? Pues he pasado muchos meses con severos contratiempos en los isquios que me imposibilitaban tener zancada y me daban inseguridad en la pisada en terreno técnicos. Nunca se me han dado especialmente bien, pero hasta hace bien poco, sentía que tenía que olvidarme de carreras duras como la de ayer.

También coincide esta nueva etapa con plantearme las cosas de otra forma. He asumido la edad que indica mi DNI. Lo cual significa que tengo que asumir mi desgaste y mis condiciones. Compararme con los de mi edad. Reconocer mi pérdida de prestaciones. Y, lo que me ha vuelto, son las ganas y el sentido de correr. Os digo, sinceramente, que hasta hace unos meses, no lo veía claro.

Bueno, sea como sea, no me arrepiento ni un ápice de haberme inscrito. La carrera, ya la habéis descrito, es estrictamente montañera. Dura, técnica y corrible. Es completa. Buenos paisajes. Buena organización.

Me la planteé absolutamente por libre. Iba a improvisar, en virtud de mis posibilidades y mi estado, la forma de correrla. Subí muy bien la Calzada. Reconozco que hasta reservón. La última vez que la hice, fue con Arturo y Tito y me sentí bastante chungo. No ya por seguirlos, que es imposible, sino que no andaba. O quizá andaba en exceso.

La subida al Montón de Trigo, la hice a tren. Es decir, no paré. A mi ritmo, pero con suficiencia. Tengo que decir que hasta disfruté. No me dolía nada. Únicamente la patata era la que, de vez en cuando, llamaba la atención. Pero se portó bien.

La bajada, canchalera, se me dio mejor de lo que pensaba. Un poco torpe, pero iba bien. Saltaba sin problemas y, para mi sorpresa, hasta pasé a algunos. Esto me animó bastante.

El resto, pues en los toboganes de bajada, a tope. Lo que me hizo sentir antiguas sensaciones. Y las subidas, esas pequeñas pero empinadas rampas, a tren. Según mi capacidad. Después, en el GR10, pues corrí lo que pude. Pero no medí bien y no controlé que podía haberme dado más caña. Pensaba que íbamos a bajar en cualquier momento más vertical de lo que lo hicimos. Y no di todo lo que podía.

Finalmente agradeceros a todos que estuviera allí. Es reconfortante el ánimo y la charla. Me congratulo de vuestros resultados, como ya he dicho. Y espero seguir teniendo fuerza, sentido y sensaciones para poder acompañaros. Eso sí, un poco o un mucho más atrás de por donde vayáis vosotros... ¡que sois unos auténticos cohetes!

Temporada 2009/2010

 Llegado el mes de septiembre se inicia la temporada y es momento de plantearse los objetivos para el nuevo curso. Ya sé que acabamos de terminar una carrera de montaña de más de 20 kilómetros y con tres mil metros de desnivel acumulado, pero es que solo era un aperitivo, los locos del Cerro somos así.

 

 El gran objetivo de este año se perfila justo al final de la temporada, el “Goierriko 2 haundiak”, o los dos grandes del Goierri, a saber, Txindoki y Aizkorri, que nos esperan a mediados de julio en un pequeño paseo por las bellas tierras guipuzcoanas.

 

 Queda por tanto buscar objetivos intermedios, buscando en principio únicamente algo de diversión y ambiente a la hora de hacer parte de los muchísimos kilómetros que tendremos que recorrer para afinar nuestras piernas, nuestro corazón y nuestra mente de cara al ultra.

 

 En principio, ya que seguramente según pasen las semanas se irán haciendo cambios dependiendo de múltiples factores, el calendario sería más o menos:

 

 

13/09/09

Becerril

10.000 m

27/09/09

Panes – Potes

28.5 km

29/11/09

Zaragoza

Maratón

31/12/09

Galapagar

8 km

14/02/10

Sevilla

Maratón

07/03/10

Tragamillas

Media Maratón

28/03/10

Segovia

Media Maratón

25/04/10

Mapoma

Maratón

20/06/10

MAM

Maratón Montaña

17/07/10

G2H

Ultra

 

 Antes de echaros las manos a la cabeza, recordad que las maratones no se van a hacer a ritmo de competición. Otro cambio que podría haber sería en caso de que el bombo de la “Zegama-Aizkorri” fuera provechoso.

 

 Y ahora….. ¡opinad!

7 de septiembre de 2009

Una señora carrera.

Pues sí, este recién nacido circuito de la Carrera de las Dehesas ha elevado el caché de esta veterana prueba.
Desde hoy se ha convertido en toda una carrera por montaña. Y, no es que antes fuera un paseo, que uno ha sufrido su orografía desde los tiempos en que acababa en Cotos a los siguientes con final en el albergue de Peñalara.
Pero, esa subida al Montón de Trigo con las vistas de Peña Aguila o la Pinareja con el Sol en una ladera y la niebla en la otra engancha.
Esa bajada entre praderíos que meses atrás eran regueros en deshielo, larga, salpicada de pequeños collados, cruces de arroyos, montoneras de gruesos pinos cortados en la vertiente segoviana y de nuevo trechos de dura pendiente entre helechos que aumentan la humedad y la sensación de ahogo (tuvimos suerte con la temperatura). Para finalizar un terreno corrible donde la cabeza quiere más que las piernas y que supone la puntilla.
El descanso de tres días me vino fenomenal. Desde el comienzo me encontré capaz de llevar un ritmo sostenido durante toda la subida de la Calzada Romana donde por prudencia caminé durante su último tramo.
Fue ahí donde tuve el placer de compartir metros con Bea la ganadora de la prueba finalmente, ella y la referencia de Pedro del Tierratrágame que nos precedía unos metros me auguraban una buena situación de carrera aunque mi gran amigo Fernan se me escapara quedaba mucho por delante y albergaba la esperanza de remontar posiciones en el tramo final.
Desde montón de Trigo donde disfruté mucho Bea se escapó metro a metro con una facilidad pasmosa y me quedé con Pedro. Me encontré bien ágil de piernas para saltar y bajé bastante más fácil que otras ocasiones pero siempre conservando.
Así llegamos al nuevo tramo de subida, que primeramente decidí afrontar al ralentí y después fui afrontando como pude, caminando algo más de lo que me hubiera gustado.
La decepción vino cuando el terreno perdió porcentaje y, aunque se podia correr bien las piernas estaban pesadas. Allí donde esperaba remontar fui remontado por varios corredores que llegaban por detrás, la misma Yoli, segunda fémina se me escapó en el avituallamiento de Fuenfría.
Desde ahí sólo quedaba llegar.
En conjunto todos los Locos que pululamos por aquí cumplimos llegando en un puñado de minutos. Especial mención para nuestro recién estrenado finisher que se batió el cobre como esperábamos, como un jabato.
A él le debo mi arenga de antes de las pruebas que esta vez por el verano, la vida social y los horarios no pude escribir, queda para otra campeón.
Y, me queda un puntito de pena y rebeldía por haber perdido el espíritu de lucha, por haberme acomodado en los ritmos y entregarme tan facilmente cuando la cosa se pone dificil.
Es algo que tengo que analizar y de lo que sacar conclusiones.

Veni vidi vici

Y llegó el día. 06:50 am. Suena el despertador y aún remoloneo cinco minutos entre las sábanas. Lo primero que hago al tocar suelo es comprobar cómo tengo las patas. Perfectas, noto como fue un acierto descansar el viernes y no salir al entreno. Desconozco por qué, pero desde que me paro un rato a desayunar y empiezo a darle vueltas a la cabeza tengo la "certeza" de que hoy la carrera la acabaré. Ilusión intacta y mucha gente a la que no puedo fallar. El tesón y los entrenamientos atesorados hoy darán su fruto.
7:30 - Reunión general para repartirnos en los coches y enfilamos la carretera hacia Las Dehesas.
09:11 - Comienza la carrera. Siguiendo los consejos del amigo Fernan (y la verdad, de todos) salgo reservón, a un ritmo tranquilo y con cabeza. Si hay algo que ya traía aprendido de mis andanzas en MTB es la capacidad de dosificar y tengo clarísimo que hoy esa será la clave. Dos hitos fundamentales en mi cabeza: Pico de Montón de trigo; y segundo paso por Fuenfría. Con esos dos en el saco la carrera estaría hecha. Sólo sería cuestión de paciencia.
Mis primeros pasos certifican que tengo las patas preparadas para la batalla. El ascenso por la calzada romana está siendo más fácil de lo que esperaba y al frente llevo a Mavegam, el único al que he visto desde que dieron la salida ya que Fernan y Prisi salieron como alma que lleva el diablo y a Ppong no le tengo localizado. Después de perder durante un rato a Mavegam veo que empiezo a acortar la distancia que nos separa, hasta que me doy cuenta de que ha bajado el ritmo y me está esperando. Por un lado lo agradezco muchísimo. Por otro me sabe mal por él, tendrá que esperarme demasiado y lo haré ir a un ritmo incómodo. Primer avituallamiento en Fuenfría y hacia cerro Minguete. Destacable de este tramo, la preciosa vista del valle que tenemos a la derecha. Ganas me dan de pararme a observarla, pero sé que no debo. Dejo pendiente una ascensión más tranquila con mi cuñado y algún amigo, sé que disfrutarán enormemente de ésta.
10:05 aprox. - Montón de trigo. Después de intercalar Ca-Co con algo de trepa-riscos hemos tomado un "Montón de trigo" y tenemos el buche lleno, por lo que bajada desenfrenada para perder kilos. Se me va un poco de las manos, me dejo llevar por el entusiasmo y tras adelantar a algún corredor disfruto de una bajada rápida donde comprendo que realmente estoy enamorado de éste deporte y que quiero que me acompañe por el resto de los tiempos. Miro hacia atrás y veo que Mavegam viene algo lejos, tomo conciencia de que no debo llevar ese ritmo si quiero terminar y bajo la marcha. Laaaaaaaargaaaaa y precioooooooosaaaaa bajada donde mis piernas empiezan a cansarse mucho.
10:43 aprox. - Comienza de nuevo la subida y pronto se resentirán mis piernas de la dura baja donde he acumulado mucha tensión. Algo que debo practicar a partir de ahora, además de acumular kilómetros, la técnica de la bajada. Pronto veré como Mavegam tiene que bajar su ritmo para ir esperándome, cosa que agradezco porque me obliga a no bajar la guardia ni el tran-tran. Además, por mi carácter, no me siento presionado sino todo lo contrario, motivado para seguir más y más, motivación que me hará falta para trotar en algunos tramos de la carrera donde de no ser por este hecho habría ido andando. Seguro. Desde fuera podría parecer que sufrimos, pero yo, con sinceridad, estaba disfrutando inmensamente. Debajo de mi rostro de sufrimiento, mi corazón latía con una sonrisa y mis pulmones marcaban el compás de la sonata "Claro de Luna" (una de mis canciones preferidas).
11:28 aprox. - Alto de la Fuenfría. Dicen que segundas partes nunca fueron buenas, pero aquí se equivocaron, para mí fue la mejor. Al afrontar la última cuesta que nos llevaba desde la fuente hasta el Alto veo que arriba, al final de la cuesta, me están esperando Antonio y Jesús, dos biciclistas que además de familia son dos GRANDES AMIGOS. Eso me da la energía suficiente para sacar fuerzas de flaqueza, pegar un tirón y marcarme una subida "elegante" donde las haya. Después de charlar un poco y foto de rigor, reponer fuerzas en el avituallamiento y quedar en la meta, continuamos con el último tramo dirección Marichiva.
A partir de aquí y al llegar a Marichiva Mavegam da rienda suelta a sus correrías y enfila la cuesta ya sin el lastre, que se lo toma con mas calma con la precaución de no pisar mal y estropear lo que pinta ser algo totalmente inesperado, no sólo terminar la carrera, sino hacerlo en un tiempo aunque modesto, extraordinario.
12:02:37 - Diviso la meta. Tan sólo queda girar a la izquierda y enfilar los últimos metros. En décimas de segundo por mi cabeza pasan mil y un pensamientos. Algunos muy personales que quedan para mí, pero otros, no menos importantes, que quiero compartir con TODO el mundo y son los de gratitud para con todos aquellos que durante este último mes han estado a mi lado apoyándome, ilustrándome e incluso soportando mis dudas y rezongueos (a los que os tendréis que ir acostumbrando, porque siempre me quejo), pero sobre todo corriendo conmigo, en persona o desde la distancia, pero corriendo definitivamente. La ya sí absoluta certeza de terminar hacen que mis últimas fuerzas las gaste en un pequeño sprint que dedico como resumen a esos finales de Las Dehesas a las pistas que marcan la mayoría de nuestros entrenamientos.
12:02:48 - Vici. Se acaba de firmar una victoria y junto a mi rúbrica hay cinco más: Prisillas, Fernan130, Ppong, Mavegam y Pepe Despacio.

A todos vosotros, MUCHÍSIMAS GRACIAS, a los que en especial dedico éste mi primer éxito montañero. No quiero olvidar a Angelymabel, que también ha compartido salidas y consejos conmigo y al que felicito enormemente por su puestazo en la carrera. Sobre todo después de las molestias que ha tenido durante toda la semana (tu tampoco de olvidas nunca de mi en tus comentarios).

AUPA LOS LOCOS DEL CERRO

P.D. 1: Ya está fijada la siguiente fecha en el calendario. Mavegam, hazme un sitio en el coche.
P.D. 2: Prisillas, menos mal que era de iniciación, majo. Si me descuido me inicias en el MAM para prepararme el Zegama. ; )

Carrera de las Dehesas de Cercedilla

Comienza la carrera y Fernan130 y Prisillas salen como alma que lleva el diablo, llevamos recorridos 100 metros de los casi 23.000 de los que consta y sin darme cuenta me he quedado solo. 

Ha sido esta una carrera extraña, en principio prevista como adecuada para iniciarse en el mundo de la montaña en unos casos y como inicio de temporada en otros, el cambio de recorrido, a pesar de no habernos cogido por sorpresa, ha conseguido que esta no haya sido una carrera más, su dureza y su extraordinaria belleza quedarán en nuestro recuerdo por mucho tiempo. 

De aquí surge mi primer error, el no haber visto esta carrera como un objetivo importante hizo que el planteamiento sobre la misma fuera nulo, estaba en la línea de salida y no sabía si íbamos a ir juntos o separados, rápido o despacio… 

Por lo que heme ahí, viendo como los dos cracks se alejan entre el barullo, quisiera decir que después de pensar decido seguir su ritmo, pero sería engañarme a mí mismo, con la inconsciencia que caracteriza al novato corredor, fuerzo el ritmo y tras unos metros llego a su estela, al principio con ganas y fuerzas, pero poco después, ya en el kilómetro dos, por fin me paro a pensar y me doy cuenta de que ese no es mi ritmo, me he quemado en dos kilómetros y todavía faltan más de veinte. 

Ni que decir tiene que a partir de ahí paso el peor momento de la carrera, otra vez en tierra de nadie, por detrás no veo a nadie y por delante cada vez están más lejos, con las piernas cansadas y el corazón a 170 lpm, decido frenar poco a poco y esperar a Luis Ángel, a quien debía haber acompañado desde el principio en su primera incursión en estas lides. 

Y bien que me vino, nos juntamos faltando 100 metros para el avituallamiento de la Fuenfría, y tras unas pocas palabras, fue él que tiró de mí hasta la cima del Minguete, momento en el cual me recuperé de la paliza inicial y a partir del cual disfruté como un enano, trepando en un principio los riscos del Montón de Trigo y bajando después sin miedo entre piornos y canchales. 

Aquí la parte más bonita de toda la carrera, bajando por unos prados, junto al río, con los bosques de pinos a la izquierda y los picos cubiertos por la niebla a la derecha, uno de esos momentos mágicos que hacen valorar todo el esfuerzo que puede costar llegar hasta ahí. 

Una vez abajo, y pasados un par de maravillosos avituallamientos, en los que nada faltaba, desde ánimos hasta chocolate, pasando por unos exquisitos plátanos y jugosas naranjas, además de agua, comenzábamos de nuevo a subir, teníamos por delante cinco kilómetros hasta el segundo paso por la Fuenfría, subida tendida y trotable, pero muy larga, en la cual nuestro amiguete Luis dejó de disfrutar un rato… 

En estos momentos la duda vuelve a sobrevolar sobre mi cabeza, hay dos opciones, tirar para adelante o acompañar a Luisete intentando animarle, me quedé con la segunda, ganar tres o cuatro minutos no me iba a suponer ningún tipo de aliciente así que la solución fue sencilla. Será él ahora el que tenga que decir si le vino bien o mal, ya que hay veces que posiblemente sea mejor dejar a alguien a su ritmo y no incordiarle mucho, espero que esta vez no haya sido así.

Claro que, llegando a Fuenfría, en los últimos metros, aparecen sus colegas los ciclistas y no veáis como se puso a tirar, se le olvidaron los cansancios, los fallecimientos y los dolores de piernas, una vez allí intenté mantener un ritmo que le fuera más o menos cómodo hasta el Collado de Marichiva, desde el cual ya me dejé caer hasta llegar a la meta, dónde entré una vez más corriendo junto a mi chico, me encanta ver la cara de ilusión que lleva en esos metros. 

Así que la conclusión es positiva, tras esos primeros kilómetros de apuro, una vez puesto en marcha el Diesel, disfruté muchísimo toda la carrera, y lo más importante, me quedé con ganas de haber dado otra “vueltecita”.

5 de septiembre de 2009

Variaciones dos




Ppong yo lo suelo hacer de esta manera. Luego comentamos el recorrido , kilómetros...y ya está.


Variaciones

¿Por qué no intentamos publicar todas y cada una de las distintas variantes que tenemos de entrenar por el Cerro?

Por mi parte, ahí va la del último día:

Y en esta otra dirección, datos técnicos: http://connect.garmin.com/activity/12452311
Y, queda, ponerle nombre al circuito. Como a mí se me da mal, espero de vuestra imaginación algo, ¿vale?
Saludos

4 de septiembre de 2009

Ultimando

Empiezo a estar algo nervioso y a pensar más de lo normal en la carrera del domingo. Aunque realmente no sea la primera carrera de montaña que corra, casi casi es como si tal, porque la otra que he corrido fue el diciembre pasado en Cercedilla y ni fui entrenado, ni me la tomé como tal, buscando únicamente disfrutar del trote un día de invierno por unos parajes preciosos. Además, aún no me había picado del todo el gusanillo de correr. Es por esto que tengo la ilusión de un niño con zapatos nuevos (si es que le siguen importando los zapatos nuevos a los niños de ahora) y el gusanillo en el estómago cuan un enamorado.

De aquí al domingo se me va ha hacer eterno, pero pienso disfrutar de cada nueva sensación que vaya apareciendo y es que, como todos los que disfrutamos de algún deporte ya sabemos, una carrera es más que el momento en que se produce, es toda la preparación y después, la satisfacción de cuando menos, haberlo intentado.

Sin ánimo de enrollarme mucho mas, lo único que me queda por pedir es:
¿Cuál sería tu último consejo para que no solamente corra, sino que termine y disfrute esta carrera?

3 de septiembre de 2009

Otra pista

Bien, bien, entre Pepe y Fernando habéis descubierto de que se trata, es una proposición indecente, seguimos con las pistas...



1 de septiembre de 2009

¿?

Es posible que no os lo creáis. Además, desconozco la razón de porqué he pinchado, pero desde el blog de prisillas, en la parte superior, mas o menos al centro pone "Siguiente blog". Pues bien, la curiosidad mató al gato y voy yo y hago miau. Total, que pincho y me sale lo siguiente:

http://fireworkslights.blogspot.com/

Al parecer, cada vez que pinchas sale un blog de forma aleatoria, luego es posible que nunca más me vuelva a salir éste, pero me ha llamado extrañamente la atención que en el pequeño comentario que describe al blogger pone algo así como "I'm a really friendly girl" (que viene a significar para los no angloleyentes "Soy una chica verdaderamente amigable"). Como a mí ésto ya me viene tarde he pensado acto seguido en Lluvio o en mi hermano. La verdad es que también me ha hecho bastante gracia la casualidad ;).

Un juego muy fácil



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