23 de octubre de 2014

Objetivo conseguido

Sábado 18 8h45’ Lonja del Monasterio de San Lorenzo de el Escorial.

Viviendo el ambiente de los minutos previos a la salida, la temperatura hace presagiar una climatología muy favorable, acompañado de mis cachorros y la “Loca” de mi mujer, de grandes amigos que se han acercado para darnos su apoyo en estos momentos, Prisi, Rafa y Dioni. No sé muy bien porque estoy nervioso, esta sensación hacía mucho que no la sentía antes de una carrera, tal vez la intención de ir con el cuchillo entre los dientes tenga algo que ver.Me quito la chaqueta del chándal, besos y abrazos varios y nos acercamos a buscar nuestro sitio en el pelotón de salida. Nos deseamos suerte y casi sin darnos cuenta estamos trotando.

Los primeros kilómetros de asfalto combinando trote suave con paso ligero en las primeras rampas por los adoquines y asfalto. Las primeras sensaciones son muy buenas, me noto ligero y muy bien de pulsaciones. Es pronto, pero esto promete. Llegamos al primer avituallamiento (km.4) y aprovecho para beber un poco de agua y no gastar de mis botellas. Comienza la subida de verdad, el camino se va empinando y estrechando, sin forzar la máquina y controlando las pulsaciones voy pasando gente y en cada “Z” aprovecho para ver que no me distancio mucho de Carlos. Así llego a la cima de Abantos en 1h18’, y pienso “esto tiene buena pinta”, me encuentro muy bien de patas y lo mejor que las pulsaciones siguen sin pasar de 150ppm. Dos minutos después llega mi compi y echamos a trotar, el primer objetivo de pasar el primer corte lo tenemos controlado. Comienza la bajada y las pulsaciones empiezan a subir, y no por el esfuerzo, se empiezan a oír las voces del Gallu, abrazo fuerte y seguir trotando. Poco más adelante estaban los Locos con sus cencerros animando a todo el que pasaba por su lado. Esto es mucho mejor que cualquier gel o barrita energética. Llegamos al avituallamiento (km11+-) en 1h43’ justo dentro de mis cálculos y suficiente para pasar el corte y poder ir desahogados a partir aquí.
Por allí también andaba mi family, alguna Loca más con sus cachorrillas. Reemprendemos la marcha acompañados de Prisi, sin haberlo hablado seguimos haciendo la carrera “juntos pero no revueltos”, apenas 100 o 200 metros nos separaban, cada uno a nuestro ritmo pero sin perder el contacto en ningún momento. Tras una dura y técnica bajada Prisi nos da los últimos consejos y se vuelve al coche. A partir de este momento empiezo a tener una batalla mental entre el Chema conservador y el Chema menos tractor, las esperas de reagrupamiento van siendo mayores y algo me pide que arriesgue. Tras unos momentos raros de vernos “agobiados” por el supuesto escoba que no sabía las horas de corte, comenzamos el siguiente tramo de subida, enseguida empiezo a subir con fuerza y poco a poco voy aprovechado los pequeños tramos en los que se puede trotar. De nuevo empiezo a oír los cencerros, son Rafa y Dioni y tras comentarles mis dudas me aconsejan seguir adelante con mi carrera. Al poco tiempo me encontraba en el avituallamiento de Robledondo (km20) refrescando las patas con el agua de la fuente y dando buena cuenta de frutos secos, alguna pequeña barrita y algo de membrillo. Pregunto por el corte y me dicen que vamos unos 35 min. por delante, con lo que no me cuadra que el escoba vaya con nosotros. Al llegar Carlos le digo que voy a tirar para adelante mientras tengas fuerzas, me quedo tranquilo porque se que lo entiende y Dioni se queda con él, de propina yo me llevo a Rafa de acompañante. Un lujo compartir unos kilómetros con él, animando y alentándome a cada paso. Así llegamos a la segunda cota del día en la que me deja sólo tras darme la última arenga.

A partir de aquí disfrutando del recorrido, trotando lo máximo posible aunque las sensaciones eran muy raras, no terminar de ir nada suelto bajando mientras que en las subidas cada vez me sentía más a gusto. Y así casi sin darme cuenta me voy acercando a la tercera subida del día, acercándome a los corredores que me precedían. Llegando al Risco Alto empiezo a recuperar posiciones, al igual que la bajada en la que ahora si las piernas responden y me dejan seguir pasando gente. Desde aquí hasta el avituallamiento del Malagón (km32+-) fueron unos momento de disfrute total, el paisaje precioso, las más que buenas sensaciones y pensar que el objetivo cada vez estaba más cerca me hicieron vivir fuertes emociones que terminaron de aflorar al ver en el avituallamiento e Alex, Kike, Alberto, Ana, Elena, Naia, Alvi, Pablo y Silvia.
Que más se puede pedir. Pues ya puesto un poco fruta, agua y medio Monster….jaja Convencido que ya “sólo” faltaba rematar la faena en los 9km, prácticamente todos de bajada, hasta la meta. Tras unos primeros km en los que si podía trotar a buen ritmo, las raras sensaciones volvieron a aparecer, no conseguía trotar con la soltura que quería, de hecho tenía que recurrir a nuestro querido CA_CO. Estás sensaciones bajando contrastaban con las fuerzas con las que afronté los dos repechos que daban paso a los 2,5km de asfalto ya en San Lorenzo. Aquí ya empecé a mirar adelante y atrás buscando a algún corredor que me pudiera “fastidiar” mi momento de entrada a meta, aunque suene egoísta lo quería para mí, bueno realmente no era para mí. A un km de meta me cruzo con Fernan, que no pudo aguantar el estar en la meta esperando y se fue a nuestro encuentro.
 Aprovecho para pedirle que me saque de la riñonera un trocito de tela que tenía preparado y empiezo a sentir al fondo a esa gran familia que son los Locos, Locas y Cachorros que han preparado un pasillo humano y que no dejan de animar y aplaudir, les agradezco con un gesto su ayuda y me dirijo a cruzar la meta. Momento que aprovecho para sacar la dedicatoria que tenía preparada y pensada hace ya tiempo y que creo que no olvidaré nunca, mi tío se merecía este humilde y sincero homenaje, su lucha durante estos meses me ha servido de estímulo para los entrenamientos y sé que ese extra de fuerza en muchos momentos de la carrera no era otra cosa que su ayuda compañía.
A partir de ese momento no se si mi cara reflejaba la satisfacción y felicidad que sentía, me había salido una carrera casi perfecta y ya sólo me faltaba ver entrar en meta a mi COMPI, algo que no tardó mucho en suceder. Su cara sí que reflejaba satisfacción. Ya sólo queda agradecer a todos los que me habéis ayudado a conseguirlo, a Prisi por prepararnos, asesorarnos, acompañarnos y sobre todo por hacernos creer en nosotros. A Rafa, Dioni por la paliza que se dieron para acompañarnos y animarnos. A Kike, Alberto, Elena, Naia, Arancha, Iratxe, Arancha, Fernan, MariCarmen y alguno que se seguro me dejo, gracias por los ánimos y por alegraros por nosotros. A mis Tractores, Ana, Alex, Ricky (estos más cerca) y Halfon y Hugo al otro lado del móvil pensando en nosotros. Al resto de Locos que sé que alegran por nosotros casi más que por sus éxitos. A mis padres porque sin ellos yo no estaría aquí para hacer estas Locuras. A mis cachorros Alvi y Pablo que a su manera también ayudan, animan y porque muchas de estas las hago por ellos, espero que algún les sirva de algo. A mi mujer que me ha soportado cómo una santa estos meses sin una queja porque sabía que lo necesitaba y cómo muestra el pedazo abrazo que nos dimos en la meta. (Muchas gracias Aran por haber cazado el momento).

Y ya sólo me queda felicitar a mi COMPI y gran AMIGO Carlos por la carrera que hizo y darle las gracias porque,cómo hemos comentado en alguna ocasión, nuestros éxitos es algo de los dos, juntos hacemos algo mas que un buen equipo, sé que suena muy “moñas” pero es así. Pues ale, espero no haberos aburrido por el ladrillaco y por la “moñeces” del club de “Hello Kitty” pero la ocasión lo merecía.

Por cierto no he comentado nada de la carrera, recorrido muy bonito, avituallamientos mucho más que correctos, muchos voluntarios en los puntos conflictivos, el detalle de grabar la medalla con el tiempo, en fin que una buena carrera muy recomendable y que espero repetir.


A Seguir Sumando…

4 comentarios:

  1. Chema me ha encantado esta crónica porque está escrita desde el corazón, si das pinceladas de la carrera pero las justas y necesarias, lo importante es todo lo demás y sobre todo como os habéis preparado para alcanzar esa meta.

    El próximo año espero poder compartir con vosotros esas sensaciones.

    ResponderEliminar
  2. Un placer haber compartido ese último kilómetro tractoril con vosotros. Me alegro que ambos hayáis conseguido este nuevo reto al que no le han faltado dificultades.
    Siempre he admirado vuestra capacidad de sufrimiento y vuestro amor por este duro deporte.
    Me quito el sombrero. Arriba esos tractores.

    ResponderEliminar
  3. Me alegra un montón haber aportado mi pequeño granito de arena en este desafio vuestro. Creo que esta carrera ha sido un pasito más en vuestra evolución como corredores y, os ha mostrado un abanico de posibilidades nuevas que explorar. Espero que con decisión sigáis con ilusión adelante.
    Felicitaros por vuestra constancia, entrega, humildad y ejemplo de compañerismo.

    ResponderEliminar
  4. Ole, ole y ole. Y ole que ole! Chema, si hay algo que admiro es vuestro amor por este "capricho" nuestro de bebernos las montañas a golpe de correr (cuando se puede). Aunque hasta ahora siempre lo he hecho en silencio, hoy quiero gritarte lo pequeño que soy a vuestro lado cuando hacéis estas demostraciones de superación, porque cualquier esfuerzo que me pueda suponer a mí lograr algo semejante vosotros lo superáis multiplicado por infinito y sin embargo lo hacéis CON DOS COJONES.
    Por favor, quiero más entradas de estas en el blog, entradas sencillas que rezuman sentimiento en cada frase y que sin grandes metáforas ni retórica me anudan la garganta. Entradas humanas que se mezclen con el maquillaje de las habituales (entre las que pongo en cabeza las de un servidor, maquillador incansable de la realidad). Entradas de tu a tu.
    Grande Chema y grande Carlos. ¡Dos grandes, más que titanes!

    ResponderEliminar