¿Donde están mis locos del cerro?.
Poco queda para que el cambio de horario llegue y entonces todas esas sendas mullidas por las lluvias y por la hierba se abriran ante nosotros. Barro, piedras y charcos para disfrutar de las lluvias y del deshielo.
Os imagino espectantes, afilando el taqueteado de las zapas, revisando esos cordones gastados, desempolvando el uniforme de batalla.
Este año la épica nos llama a todos en batallas extenuantes de 7 o 15 horas, donde tendremos que dar lo mejor de cada uno de nosotros, donde pondremos nuestro tobillo por el del compañero maltrecho para llevarle en volandas a la victoria. Donde nos abrazaremos en piña en Cercedilla y en Beasain.
Como aquellos ferozes guerreros que al grito de ¡ desperta ferro ! se lanzaron a la conquista de tierras lejanas.
Poco queda para que el cambio de horario llegue y entonces todas esas sendas mullidas por las lluvias y por la hierba se abriran ante nosotros. Barro, piedras y charcos para disfrutar de las lluvias y del deshielo.
Os imagino espectantes, afilando el taqueteado de las zapas, revisando esos cordones gastados, desempolvando el uniforme de batalla.
Este año la épica nos llama a todos en batallas extenuantes de 7 o 15 horas, donde tendremos que dar lo mejor de cada uno de nosotros, donde pondremos nuestro tobillo por el del compañero maltrecho para llevarle en volandas a la victoria. Donde nos abrazaremos en piña en Cercedilla y en Beasain.
Como aquellos ferozes guerreros que al grito de ¡ desperta ferro ! se lanzaron a la conquista de tierras lejanas.
Como sabes darnos donde nos duele y pintar con bellas palabras lo que todos estamos deseando desde hace tiempo. A ver si ésta, una vez más, la realidad supera la ficción.
ResponderEliminar¡¡¡ DEPERTA FERRO !!!
Hierve la sangre con los primeros rayos de sol primaveral, palpita el corazón al son de los vespertinos tambores oídos en lontananza. Es el susurro, que pronto será estruendo, de la guerra que se acerca, incruenta, eso sí, pero no menos heroica. ¡Despierta guerrero de las cumbres! Son las altas cimas las que te convocan, ellas son las que te jalean. ¿Podrás acaso rechazar su anual llamada?
ResponderEliminarYa sabéis que yo de prosa y poesía ando corto en comparación con vuestras mercedes, jeje, pero cuando hay que entrar en acción me tiro de cabeza... ¡esta mañana he estado en el Cerro!
ResponderEliminarMuchas veces solo hace falta un empujón, este post para mí lo ha sido, las arengas del Mister siempre son efectivas... ¡gracias!