15 de octubre de 2009

El ave Fenix

Ayer tuvimos una numerosa salida de grupo con gente de todos los ritmos. Entre ellos estaban algunos de los que, a su buena forma física unen una envidiable juventud, como mariete, lluvio, uge, carlosnegro, rafagti,..
El caso es que unos cuantos empezamos a hacer algunos cambios de ritmo que nos había preparado maese prisillas. Exceptuando mariete, los demás se lanzaron en las dos primeras series de cambios a un fervor casi 'suicida' teniendo en cuenta la actual forma física de varios de ellos. De tal modo que a lo largo de los kilómetros la gente comenzó a descolgarse... Tanto es así que al final nos vimos prisillas y yo solos afrontando la última tanda y acompañándonos mutuamente como en tantas otras ocasiones este año. Fue entonces, sin el barullo de piernas y resoples de tanto corredor, cuando me di cuenta de que el ave Fenix siempre termina resurgiendo y que, cuando se sabe esperar, el punto de forma va llegando sin prisa pero sin pausa. Prisillas me transmitió muy buenas sensaciones y me recordó al corredor ambicioso de las primeras quedadas.
¡Ojalá que mis percepciones fueran buenas y hayamos recuperado al gran corredor que siempre ha sido!

5 comentarios:

  1. Joder Fernando me dejas sin palabras jeje.
    Es cierto que el entrenamiento de ayer supuso un empujón de moral muy grande.
    Si las lesiones me respetan espero poder seguir mejorando un poquito más con el tiempo.
    Disfruté mucho de esa última tanda mano a mano, exigente pero controlada, especialmente ese ultimo cambio de 40'' en el que nos mostramos poderosos. Lo principal, que aún había para más.
    Un abrazo y gracias.

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  2. ¡¡¡Ufff, menudo calentón Mikel!!! jeje.
    No pasa nada si el cuerpo te pide km, eso es que ya tienes la cabeza puesta en la G2H y esperas ya las próximas salidas con Ppong.

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  3. Esto mi abuela, que era muy sabia, lo resumiría diciendo que "el que tuvo, retuvo".
    Qué envidia de salida, con los cuarentones saliéndose de la tabla.
    Míkel, cuidado, que un día vas a salir a rodar largo y suave y te vamos a tener que ir a buscar a Segovia o más allá.

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  4. ¡animales, que sois unos animales!

    ¡Me alegro un montón que estéis tan fuertes!

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  5. Pues esta tarde, el ave fenix y algún otro que sin serlo también andaba por ahí, me han dado para el pelo con los benditos cambios de ritmo. Prisi, me alegro que vayas reencontrando tu "chispa".

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