15 de septiembre de 2009

Corriendo en Becerril

Tengo que reconocer que en principio no me hacía mucha ilusión correr esta carrera, el año pasado también corrí un 10.000 dos semanas antes de la Panes-Potes, son carreras muy agónicas que me dejan las piernas bastante tocadas y no me dejan entrenar a gusto. Pero la idea de compartir una mañana con la gente del club y bastante cerca de casa me hizo cambiar de opinión.

La mañana era muy buena para correr, por fin parece que el verano ha dado una pequeña tregua y el calor era soportable. Nada más empezar, mientras busco mi lugar en el grupo, me doy cuenta de cómo Prisillas se pone a tirar muy fuerte, al igual que en la carrera de las Dehesas, poco a poco llego a la altura del grupo pensando en que esta vez no me iba a quedar, ya que solo eran diez kilómetros, había que poner algo de calidad.

Así pasa el primer kilómetro, subiendo a 4:07, en el segundo, durísimo, el ritmo "baja" hasta los 4:38, llegamos entonces a la zona en la cual se debería poder correr pero un suelo de piedras con varias curvas de lo más "amigables" no permiten disfrutar de una bajada continuada, tercer kilómetro en 4:08, finalmente, en los dos últimos kilómetros de la vuelta, por terreno cómodo, en ligero descenso aunque con pequeños toboganes que rompían el ritmo, conseguimos bajar la barrera de los 4 minutos por kilómetro.

Durante la vuelta se va desgranando el grupo formado en un principio, primero Prisillas, que perdió unos metros, pocos, pero suficientes para no poder engancharse de nuevo, y al final de la vuelta Fernando y yo, que vimos como ni siquiera Víctor pudo contestar el arreón de Melchor, quedando en tierra de nadie.

En la segunda vuelta cierto sufrimiento, haciendo los kilómetros 15 segundos más lento que en la primera, con un segundo kilómetro en el que no me hubiera importado bajar algo más el ritmo si Fernando me hubiera dejado, pero sus ánimos y viendo que manteníamos posiciones tanto por delante como por detrás hizo que apretara un poco los dientes y aguantara un par de kilómetros más, guardando un poco para el último, en el que intenté imitar al gran Ppong con un sprint realmente divertido en el que aprovechamos para devolverle la pelota al único corredor que había osado adelantarnos durante esa segunda vuelta.

Tiempo final de 42:37, lejos de mi mejor marca, pero contento, sobre todo teniendo en cuenta la dureza del circuito… y la facilidad del que me sirvió para bajar de 40 minutos ;-).

2 comentarios:

  1. Lo del sprint la verdad me asustó un poco porque el año pasado después de esperar en ciertos momentos a lluvio, me dejó al final. Hubo un momento en el que estaba a punto de 'petar' por las ganas que le pusiste. Además no era cuestión de fuerzas (no las llevaba mal) si no de velocidad: no me daban más las piernas... Eso sí, hiciste bien que eso de te quieran pasar al final está muy feo...

    ResponderEliminar
  2. Pues lo de pasar al final díselo a Ppong, ggrrrrrg. Bueno, la verdad es que faltaban al menos 2 Kms., no voy a ser un asqueroso mentiroso. Yo por mi parte, sí que bajé la media de mi MMP en un 10000, cosa que no era muy difícil, porque los únicos que había hecho fueron el año pasado y sin entrenamiento alguno, por lo que después de entrenar "algo" se me tenía que dar mejor por narices (jejeje).
    Me alegro mucho de que disfrutaras de la carrera, porque la verdad es que la segunda vuelta se hace algo dura por esa subida, aunque después se puede recuperar algo. Es impresionante con qué facilidad corréis una tras otra y con esos tiempos.

    ResponderEliminar